El siguiente texto es un esbozo de carta escrito por Chagdud Khadro con la intención de preparar a su familia y a sus amigos para el momento de su muerte.
A mi querida familia y amigos,
En primer lugar quiero que sepan cuan profundamente importantes son ustedes para mí. Nuestra conexión en esta vida, especialmente nuestros momentos de afecto y alegría, representan mi gran buena fortuna. De forma poderosa, el proceso de la muerte trae de vuelta la verdad de que, tan cierto como el hecho de que nos reunimos es el hecho de que deberemos separarnos, y de que el tiempo entre uno y otro es muy breve. Por supuesto que siento pena, pero siento también una dulce e intensa gratitud por todo lo que hemos compartido.
No obstante, a medida que la muerte se aproxima, todo el apego normal que tengo por ustedes no me será de gran ayuda, pues no tengo el poder para volver de ese viaje. Y su apego hacia mí, a pesar de ser algo natural, tampoco es útil, pues puede distraerme, poniendo mi atención en aquello a lo cual no puedo retornar -las circunstancias de mi vida junto a ustedes- y estorbar en las delicadas transiciones de la muerte. Lo que necesito de ustedes ahora es tranquilidad, desprendimiento y el reconocimiento de que, sea cual fuere la apariencia externa de mi muerte, interiormente ella consiste en una profunda oportunidad espiritual. Sus oraciones, nacidas de su propio amor y compasión más profundos, sostendrán ciertamente mi realización en esta oportunidad.
Ustedes saben que mi entrenamiento espiritual en los últimos años ha sido en el Budismo tibetano Vajrayana. Los maestros del linaje de esta tradición dejaron instrucciones minuciosas sobre lo que sucede en la muerte y sobre las habilidades de meditación necesarias para pasar de modo favorable por la transición que implica. Específicamente aprendí una técnica llamada phowa, o “transferencia de conciencia en el momento de la muerte”. He solicitado que algunos practicantes budistas estén presentes en el momento de mi muerte para que me ayuden en esta práctica.
Ellos me ayudarán a sentarme, si eso fuera posible, y harán la práctica conmigo. Es probable que ellos necesiten golpear suavemente mi coronilla, pues el objetivo de la práctica de phowa es direccionar la conciencia desde la cabeza hacia afuera, en dirección a un renacimiento espiritual. Phowa no implica ningún ritual extravagante y aproximadamente no tardará más de una hora. En general, los hospitales ceden un espacio y un tiempo para esta meditación, sobretodo si ustedes lo discuten anticipadamente con el equipo médico.
A continuación sigue una lista de instrucciones. Espero que sean suficientemente claras, pues tal vez no pueda esclarecerlas cuando esté mi muerte esté más cerca. Si aún tuvieran alguna duda, ustedes pueden consultar a cualquiera de mis lamas o amigos del Dharma.
1)Por favor avisen a mi lama y a mis amigos del Dharma a tiempo, para que puedan estar presentes antes de que muera. Está claro que decir cuando será el momento mismo de la muerte puede ser difícil, así que, si por algún motivo ellos no pudiesen llegar a tiempo, no se preocupen. La bendición de mi entrenamiento espiritual me apoyará en este tránsito.
2)Cuando la muerte se aproxime, por favor no toquen mi cuerpo, especialmente mis manos y pies, porque el contacto amoroso podría atraer mi atención para las partes inferiores de mi cuerpo, justamente cuando toda mi concentración debiera estar dirigida hacia la coronilla de mi cabeza.
3) Si ningún otro practicante espiritual está presente cuando yo muera, golpéen levemente en el medio de mi cráneo, a una distancia de aproximadamente ocho dedos atrás de la línea original del cabello. Eso puede ayudar inmensamente en el direccionamiento de la salida de mi conciencia.
4)Es mejor que mi cuerpo no sea muy manoseado antes de phowa. Ciertas señales aparecen
cuando la transferencia es realizada con suceso, que los practicantes serán capaces de reconocer.
Después que esto ocurra, no importa lo que suceda con mi cuerpo. Preferiría que fuese cremado de la manera más económica posible, y que las cenizas fuesen usadas en la construcción de tzatzas, pequeñas imágenes sagradas moldeadas en arcilla. Uno de los lamas podrá orientarlos. Si fuese muy difícil providenciar las tza-tzas, soliciten a mis amigos del Dharma que dispersen mis cenizas y recen. Son apenas cenizas, mero residuo de mi vida.
5)Soy un donador de órganos y preferentemente sean retirados después que mi conciencia se ha transferido. Si esto no sucede, no se preocupen, mi lama me asegura que el mérito de ofrecer órganos supera la perturbación en el cuerpo, y la conciencia encontrará la dirección de un estado superior de nacimiento basada en este mérito.
6)Existe la remota posibilidad que la transferencia no sea realizada, los órganos no sean retirados y mi conciencia quede alojada en el cuerpo por cuatro días y tres noches, Esto puede traer dificultades para ustedes, ya que mi cuerpo no podrá ser cremado ni enterrado hasta que la conciencia lo haya dejado, y esto lo confirme un lama. En California, y en otros estados el cuerpo puede ser mantenido, contando que posean una certificación de fallecimiento y que este sea debidamente refrigerado, pero no pueden enterrarlo o cremarlo por propia cuenta. No quiero sobrecargarlos con mi cadáver(perdón si muchas graciosas posibilidades vienen a mi mente) pues quiero que ustedes sean informados de no destruirlo prematuramente. Si no pueden encontrar um lugar donde él pueda ser dejado en reposo, llamen a los lamas y a mis amigos del Dharma y pidan firmemente que practiquen powa. La realización de powa a distancia requiere de un practicante de gran realización y por eso sería mejor que ellos estuviesen ante la presencia del cuerpo.
7)Por favor hagan ofrendas a los lamas que realicen oraciones y ceremonias después de mi
muerte. Designé en mi testamento una cantidad de dinero para ser usada específicamente para éste fin, porque sé que no fui la persona más virtuosa en esta vida. A no ser que powa haya sido un éxito y pueda yo renacer en un estado más allá del sufrimiento y ahí purificar mis acciones negativas de cuerpo, habla y mente. Eso traerá necesariamente sufrimiento. Ustedes, pueden aliviarlo solicitando a mis amigos del Darma que realicen oraciones y ceremonias. Específicamente deseo patrocinar a un practicante para recitar el mantra de Akshobya y crear una imagen de este Buda. Esto costará más o menos U$130, = y puede ser obtenido a través de la Fundación Chagdud Gonpa, cuya dirección se encuentra al pie. Mis lamas podrán sugerir otras ceremonias.
Sigue una lista de Lamas y amigos del Dharma
Gracias por todo lo que ustedes hicieron y lo que irán a hacer. Sé que honrar mi creencia espiritual que es diferente a la de ustedes requiere una cierta dosis de tolerancia, pero puedo esperar que el respeto que demuestran a mis pedidos se torne una fuente de energía positiva que pacifique su mente en el momento de su propia muerte. Según las enseñanzas que recibí, si todo transcurre bien, después de la muerte encontraré liberación de las preocupaciones egoístas en los reinos más allá de la muerte, y obtendré una enorme capacidad de beneficiar a ustedes y a todos los seres.
Este es mi deseo. Que así se realice.